Ingenieros navales proponen nuevo puerto de Palma

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Los ingenieros navales proponen reorganizar el puerto de Palma
Artículo publicado en: mallorcadiariodenautica.com
 
La especial incidencia y relación del conjunto de actividades que se realizan en el puerto de Palma de Mallorca sobre la actividad profesional de la mayoría de ingenieros colegiados en activo en Mallorca, así como la relación directa de nuestra profesión con el sector marítimo en su conjunto, lleva a la delegación en Illes Balears del Colegio Oficial de Ingenieros Navales y Oceánicos (COINBAL) a informar y opinar como colectivo, de una forma técnica y objetiva, de su visión sobre los planes de futuro para el “Port de Ciutat”.
 
De los estudios realizados por los técnicos del Colegio deducimos que los actuales tráficos comerciales, y sus previsiones y evoluciones, no presagian crecimientos excesivos y sostenidos en el futuro que conlleven la necesidad de dotar al puerto de nuevas grandes dársenas.
 
La amplitud existente en las principales dársenas del puerto de Palma de Mallorca, ofrecen una oportunidad para crecer y adaptarse a los nuevos retos de futuro sin una necesidad de crecimiento significativo de sus aguas abrigadas.
 
En la actualidad las actividades portuarias, incluso cuando son realizadas por la misma empresa u operadores, se realizan entremezcladas y dispersas en diferentes localizaciones, lo cual genera problemas de operatividad, optimización de recursos, y de tráfico viario en las rutas principales de acceso al puerto, así como en el propio paseo marítimo.
 
La diseminación de atraques de los ferrys en la actualidad, por diversos enclaves del puerto, muchos de ellos sin adecuadas instalaciones, es una carencia que precisa de una urgente solución, no pudiendo tampoco demorarse una solución para los pasajeros de las líneas regulares.
 
Considerando la demanda actual, y debido al crecimiento de las dimensiones de la flota de yates, es necesaria con urgencia la ampliación de superficie y de medios de varada. El puerto de Palma de Mallorca, líder en el mantenimiento y reparación de grandes yates y megayates, no dispone de instalaciones adecuadas para atender al sector de yates de más de 70 metros de eslora. Estos barcos deben ir a Barcelona, Cartagena, Sur de Francia, Italia o Malta para ser puestos en seco.
 
La situación actual requiere de acciones a corto plazo y económicamente viables, no pudiendo dilatarse su realización como consecuencia de planteamientos alejados de las necesidades reales y como consecuencia, de un altísimo coste y difícil financiación. Soluciones más ajustadas a las necesidades reales actuales y futuras, precisarán de una menor cantidad de recursos y evitarán la necesidad de dedicar parte del Puerto a usos no portuarios.
 
Se propone la eliminación de actividad comercial de líneas regulares y mercancías en los muelles de Levante, creando la posibilidad de una recuperación ciudadana de lo que fuera en el pasado el paseo de la Riba. En estos muelles existe superficie suficiente para la creación de una gran área común para las reparaciones de yates, marina de grandes yates, zonas deportivas y gran zona de ocio, etc. todas de unas dimensiones realistas y que pueden convivir y crear sinergias entre ellas. Una parte significativa de esta superficie ya se encuentra actualmente sin uso o infrautilizada.
 
Se mantiene las actuales instalaciones de reparación de travel-lift, ampliándose con la instalación de un syncrolift y una ocupación de 80.000 m2 y desaparecen las instalaciones del astillero del Contramuelle Mollet. En la zona exterior se crean dos atraques para cruceros de lujo de dimensión media. En la parte sur de los muelles comerciales se desarrolla un área de actividad lúdico-ciudadana. Se inserta en el espacio disponible una dársena para vela ligera y náutica deportiva con salida directa al mar.
 
Se crea un nuevo espacio común para atraque de Ferrys y buques Ro-Ro en la actual zona del dique del oeste, completándola con un relleno en la cara exterior de la primera alineación de dicho dique de aproximadamente 56.500 m2. En esta zona se plantea una nueva estación marítima central con servicios de pasarelas y fingers para 7 atraques.
 
En la parte interior de la segunda alineación del dique del oeste, a continuación del actual pentágono, se crean cuatro puestos de atraque para carga general convencional polivalente, provistos de medios adecuados para también atender buques de carga rodada. Se mantienen básicamente las instalaciones de gráneles sólidos y líquidos, pero realizando la reubicación de las instalaciones existentes actualmente en el muelle de San Carlos.
 
Se propone la potenciación y creación de unas conexiones por vía marítima (sea-bus) entre muelles próximos a zona Catedral y terminales de cruceros (o desde las propias playas y muelles retráctiles de estos buques) para aliviar de tránsito viario el paseo marítimo y acercar más fácilmente a los pasajeros al casco antiguo promoviendo un servicio a pie de buque. La liberación del Contramuelle Mollet de actividades industriales de reparación crearía una nueva zona de gran interés para la relación puerto-ciudad y posibles atraques de grandes yates.